miércoles, 8 de junio de 2011

Bangkok

Hemos planeado muchos, muchos viajes de manera improvisada, en tiempo récord y a la carrera, pero creo que la visita a Tailandia se lleva la palma: el lunes no sabíamos dónde pasaríamos el fin de semana y el jueves por la noche volábamos rumbo a Bangkok... 

Viernes, 3 de junio

Llegamos allí a eso de las 5 hora local y nos presentamos en casa de nuestra maravillosa anfitriona Nuria a las 6 de la mañana, listos para desplomarnos en el colchón y vegetar hasta mediodía. Después de nuestra primera comida tailandesa nos dispusimos a familiarizarnos con nuestro entorno:




En un principio, nuestra idea era aprovechar para hacer alguna visita / excursión de día, pero apenas diez minutos después de salir de casa ya sabíamos que no íbamos a ir a ningún lado: al fin y al cabo, uno no tiene un piso con vistas en Bangkok en una planta 33 todos los días... aunque Nuria y María no estarán de acuerdo conmigo ;)

Lo bueno de volverte un viajero hedonista es que puedes permitirte el lujo de hacer cosas que simplemente no caben en la apretada agenda del turista profesional, como por ejemplo ir al cine, que puede ser toda una experiencia cultural y más aún si la película se rodó en la ciudad en la que estás:



Atentos a las butacas del cine
Después del cine, combinamos turismo y gastronomía en el bufé libre de la planta 82 de la torre Baiyoke II, el edificio más alto de Tailandia y el 34º del mundo:

Baiyoke Sky Hotel

Fuente: Flickr
Sábado, 4 de junio

El sábado dedicamos el día al turisteo puro y duro, que ya tocaba. Empezamos por ir a la zona de los templos en bus acuático:


Nada más salir del barco, nos timaron como a chinos con el tuk-tuk: nos llevaron a dos tiendas, nos dejaron en un templo y el conductor se evaporó! Pero bueno, antes de las tiendas visitamos un templo budista muy chulo... y además nos salió gratis.



El conductor nos dejó tirados en el Templo de Mármol, que nos gustó bastante: 






De ahí fuimos a Wat Arun, el "templo del atardecer":



Cruzamos el río en barca y visitamos Wat Pho, lugar de descanso de Buda:





Empezaba a hacerse tarde y nosotros sin comer. Dicen que al buen hambre no hay pan duro y se ve que en algunos casos es cierto, pero a mí hubieran tenido que pagarme (y mucho) para tomarme el tentempié que se acabó comiendo S.



Desde ahí fuimos a Chinatown y comimos en un "chino-chino":




La caminata del día nos dejó agotados, así que acabamos dándonos un masaje de pies de una hora por el que pagamos la fortuna de 2,5€... Luego, cena 5 estrellas en el piso (productos de supermercado, entre ellos queso azul) y copa en una caravana aparcada en plena calle. Cuánto echaba de menos la ciudad... 

Domingo, 5 de junio


Visitamos uno de los mercados más grandes de Asia: Chatutchak, un laberinto de tiendas y más tiendas y todo un paraíso/perdición de las compras... 


De ahí fuimos a la zona de Siam, centros y más centros comerciales:


Incluso conocimos a Tom Cruise, jajaja:


Después, nada mejor que un té helado para cargar las pilas...





A última hora, repetimos plan de masaje y acabamos cenando en un italiano: esto es vida.

Lunes, 6 de junio

Último día en Bangkok, que aprovechamos para visitar la casa-museo de Jim Thompson:







Por último, comida con los ICEX y... masaje tailandés. Hay gente a la que incluso le gusta ("hay gente pa tó"), pero a mí me pareció bastante doloroso y muy poco relajante! Aún así, fueron unas grandes vacaciones (gracias, Nuria): Sin duda, hay algo mejor que visitar ciudades y es vivirlas...

Hasta la próxima, Bangkok!




3 comentarios:

  1. Precioso post, qué voy a decir!!! Y PRECIOSAS fotos!!! Habéis sido unos visitantes/turistas muyyy especiales y molones!! Así SI!!! :)

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  2. Chiqui, hacía tiempo que no entraba en el blog... después de ver estas fotos la vida en España me parece en blanco y negro. A seguir disfrutando, besitus.

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